La nariz constituye el centro de la cara, y como tal, tiene una enorme importancia en la armonía de la estética facial. Pequeñas modificaciones de la nariz producen importantes efectos en toda la cara.

Ello es visible ante un dorso prominente, una punta nasal gruesa o caída, una “giba” nasal importante.

La operación que tiende a solucionar estas alteraciones  es la Rinoplastia, o Plástica Nasal.

Consiste en realizar bajo anestesia general unas incisiones en la porción interna de la nariz, y en ciertos casos, en la piel que separa ambos orificios nasales. Se modifican los cartílagos y huesos nasales, de acuerdo a cada paciente provocando fracturas controladas de los mismos, haciendo desaparecer esa giba y logrando efectos naturales y armoniosos. 

Se coloca un yeso por unos siete días.

Los resultados definitivos se observan a los cuatro o cinco meses.

Rinoplastia

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